jueves, 23 de junio de 2011

Curso de preparación II

Ayer tuvimos otra sesión de curso de preparto y el tema en sí fue: el parto. Explicó cuándo y cómo es el proceso de traer un bebé al mundo además de darnos un par de consejos sobre qué hacer cuando se está dando a luz.

Una de las cosas que más me impactó fue saber el tiempo que puede durar la tareita. Porque, según ella un parto comienza a contarse como tal cuando las contracciones se producen a intérvalos de 10 minutos durante un par de horas. A partir de ahí un parto puede durar entre 15 y 24 horas!! La cara que se nos puso a las futuras madres fue de foto.

Otra de las cosas que me parecieron interesantes fue saber que la bañera del hospital no es sólo para dar a luz sino que también se puede usar durante la dilatación y que una puede entrar y salir cuando le plazca. Otra cosa es que esté libre. Pero, en principio, si te apetece pasar un rato dilatando en el agua...pues lo pasas. 

También habló de que no hay que obligar al padre a estar presente en el parto. Yo al principio era de las que decía: "Tú, cariño, no te despegas de mi lado!". Pero después de oir los argumentos de la matrona pienso que en parte tiene razón: no tiene sentido obligarle a quedarse si no está a gusto. Así que, después del curso, le dije a mi pareja que si en algún momento del parto sentía que era demasiado para él se podía ir. Total, para tenerlo allí con cara larga y de mal humor mejor fuera. 

Esta matrona, que ya la he tenido en otra sesión, es muy...digamos mística. Pero ojo, que me gusta. De hecho cuando hablaba del momento de recibir al bebé yo estaba allí con los ojos empañados emocionada de imaginarme a Plastilina en mi pecho recién salida de mi vientre. El caso es que dice que tenemos que pensar qué le vamos a decir a nuestra hija cuando la veamos porque ese primer contacto tendrá un gran impacto en su vida. Mi chico es muy propenso a hacer bromitas así que le dije que se fuera ya quitando de la cabeza hacer alguna en cuanto viera a Plastilina. El sonrió porque sabe que lo primero que se le va a venir a la mente va a ser un comentario "chistoso". 
No sé, yo me lo creo en parte porque, aunque el bebé no entienda las palabras sí que puede percibir que es bienvenido y eso es lo que quiero que perciba Plastilina: que la recibimos con amor y alegría. Así que desde ayer estoy pensando qué frase le diré.

Lo último que me llamó la atención de la charla es que dijo que tenemos que dejar al bebé una hora en nuestro pecho. Pasado este tiempo la matrona se lo puede llevar para pesar, medir o lo que sea, pero es importante que la primera hora que pase la criatura en este mundo sea en el pecho de la madre. En caso de que esta no pueda, porque haya pasado una cesárea o porque le estén echando puntos o lo que sea, el padre será el que tenga que pedir que le den a su bebé y ponérselo en el pecho. 

Según ella, hay estudios que demuestran que los bebés que han pasado su primera hora sin separarse de su madre lloran menos durante el primer año y duermen más. Así que, esto me lo anoto! 


La próxima semana es la última sesión y el tema será postparto y lactancia. A ver qué cuenta!

miércoles, 22 de junio de 2011

Ultima revisión

El lunes tuve la última revisión con el ginecólogo y todo va muy bien. Me dijo que ya no es posible hacerle fotos porque no salen pero, como sólo me quedan 5 semanas, creo que podré aguantarme un poquito más. Ya no tengo que ir hasta 8 semanas después del parto lo cual sería como a finales de septiembre. Un "timing" perfecto porque por esas fechas es cuando espero volver de ver a la familia.

En cuanto a los preparativos...no hemos avanzado mucho la verdad. Estuvimos mirando carritos con bastante interés y parece que hay un candidato a ganador. La pregunta es si comprarlo en la tienda o pedirlo por internet. Esta última opción es más barata pero tiene la desventaja de si algo se rompe hay que estar enviando el carro. Mientras que si lo compramos en la tienda es mucho más cómodo hacer una reclamación, devolución o lo que sea.

He mirado mucho en internet para saber la opinión de las madres sobre distintos modelos y es casi imposible decidir cuáles son mejores porque cada uno tiene ventajas e incovenientes y a cada uno le viene mejor una u otra cosa. En principio para mí es importante que no sea muy grande (mi ascensor es minúsculo), que se pliegue bien (porque viajo bastante) y que no pese mucho (en la entrada del edificio hay escaleras). Bueno y que el diseño me guste, claro.

Creo que esta semana, sin falta, iremos a por él aunque a mi madre...eso de comprar cosas antes de que el bebé nazca no le hace nada de gracia. Me dijo que lo que tenía que hacer era encargarlo y que me lo reserven hasta que nazca. Es bastante supersticiosa en ese sentido. Pero claro, qué espera? Que en cuanto salga del hospital me vaya de tiendas? Eso sí, ella ya se ha agenciado patucos, rebecas, pijamas, sábanas...me imagino que su regla sólo sirve para la futura mamá y no para la futura abuela.

viernes, 17 de junio de 2011

Curso de preparación

Decidí apuntarme a un curso de preparación al parto para informarme un poco de cómo se hacen las cosas por aquí. He oído miles de historias de qué pasa, qué duele, qué te hacen, cuántas horas, etc. y no sabía si tenía ganas de escuchar más terrores pero...al final me animé.
El curso consta de 8 sesiones: cuatro sólo mujeres y cuatro con las parejas. 
Las cuatro primeras veces vino una fisioterapeuta para explicarnos qué pasa dentro de nuestro cuerpo cuando el bebé decide salir. También nos enseñó técnicas de respiración, posturas de  dilatación y nos contó 20.000 historias de sus amigas, sus hermanas, sus clientas y ella misma.
Algunas cosas fueron muy interesantes, como que no hay que ponerse a resoplar a mil por segundo tal y como se ven siempre en las películas cuando una embarazada quiere empujar. O, a qué ayuda podemos recurrir: bola de gimnasia, bañera, cojines, tela colgada del techo...
Yo creo que se podía haber resumido todo en dos sesiones pero, como a la chica le gustaba hablar, pues de ahí salen las cuatro citas. 
En la quinta cambiamos de instructora y esta me gustó mucho más. Nos habló de la psicología prenatal e hicimos una puesta en común de cómo habíamos llegado nosotras a este mundo. En mi caso poco pude contar porque mi madre o bien no se acuerda de cómo fue su embarazo de mí o bien se confunde con el de mis hermanas. 
Me pareció muy interesante cuando se comentó que la forma de venir al mundo indica un poco cómo será la persona en el futuro. Es decir, que un bebé que rápidamente sale sin más complicaciones será una persona decidida que no se piense mucho las cosas. En cambio, hay bebés que primero quieren salir pero después...ay! después se lo piensan y como que mejor se quedan un rato más. Estos serán los indecisos o los que monten un teatro ante cualquier situación. 
Así que espero recordar bien el parto de Plastilina para luego ver si su personalidad ya se dejaba ver en el momento de venir.
La sexta cita, que fue esta semana, estaba dedicada a la familia. De ahí me quedo con varias cosillas pero, la más importante, es que hay que cuidar de la pareja. Eso es algo que siempre he tenido presente: no quiero convertirme sólo en mamá y dejar mi otros roles (mujer, pareja, amiga, etc). Sé que no va a ser fácil pero ya me he puesto en ello y cuando quedo con amigas intento no ser la típica que no habla de otra cosa que de embarazos y bebés. Con mi pareja igual, le cuento cosas que he leído sobre el tema, o cómo me siento pero sin llegar a ser monotemática. Por ahora está siendo fácil, a ver cuando llegue la criatura!
La poxima semana hablaremos sobre el parto, la lactancia y no sé qué más. A ver qué tal!